martes, 9 de mayo de 2023

Estancia en el liceo Jean Perrin en Marsella II

 MI ERASMUS A MARSELLA

Soy Lucía Luque, una alumna de 4º que ha participado en el proyecto Erasmus+. Mi destino fue Marsella y mi estancia de veinte días. Mi familia de acogida fue muy agradable y me dieron mi espacio, tenía habitación y cuarto de baño propio.

 Nos comunicamos tanto en francés como en inglés, utilizando este solamente cuando no entendía algo. Y la verdad es que mi nivel de francés avanzó muchísimo, oído, vocabulario y el lenguaje que hablan ellos día a día.
En el ámbito académico me fue muy bien, pues aunque estaba en un curso más alto, entendía la mayoría de explicaciones así que aproveche para atender. Cuando no, adelantaba deberes de España y los profesores me dejaban bastante libertad. Además se encargaban de que todo el proceso fuese bien y a menudo me preguntaban para poder ayudarme en lo que hiciese falta. 

Socialmente también me sentí incluida, mi hermana de acogida francesa me llevaba a todos lados con ella e intentaba que entendiese todo. En el instituto me relacionaba bien con la gente y aparte hicimos varios planes con sus amigos. Hacíamos quedadas en la casa, fuimos a la playa, a un partido de hockey y a una pista de patinaje.
Marsella la visité en un fin de semana con la familia de mi compañera de España, pues tenían buena relación entre ellos y nos vimos varias veces a lo largo de la estancia.

Ha pasado 1 mes desde mi experiencia y a día de hoy sigo manteniendo la amistad con la estudiante francesa y una amiga suya. A menudo nos escribimos e incluso las he invitado este verano España.

Conclusión: ha sido una experiencia inolvidable y me ha aportado mucho a nivel personal y académico. Lo recomendaría sin duda.

lunes, 8 de mayo de 2023

Estancia en el liceo Jean Perrin en Marsella

 MI EXPERIENCIA EN MARSELLA

Buenas, soy Carmen Aldana, una alumna de 4o de la ESO del centro IES Sierra
de Mijas, y a continuación voy a dar algunos detalles sobre mi reciente Erasmus a
Marsella, el cual realicé a comienzos de marzo.


Mi Erasmus duró tres semanas. Desde el primer momento fui muy bien recibida
por mi familia de acogida, que ya habían anticipado tanto carnets de autobús,
comedor o algunas actividades que haríamos próximamente. La comunicación fue muy sencilla puesto que todos nos sabíamos defender bien en inglés.

Llegué un jueves por la tarde, y el sábado de esa misma semana ya estábamos
asistiendo a un cumpleaños de una compañera del instituto. El domingo visitamos la ciudad de Marsella durante el mediodía y parte de la tarde. Los otros dos fines de semana visitamos barrios importantes, como Le Panier y pueblos cercanos, como Cassis. 

A parte de estas visitas que realizamos, nuestro día a día en el instituto también resultaba interesante. Personalmente, fui muy bien recibida por mis compañeros, con los cuales también me pude comunicar fácilmente por un medio o por otro.
En las clases, los profesores me daban libertad de organizarme y realizar tarea correspondiente a mi instituto de España, por lo que no estaba más agobiada de la cuenta por las tardes.

De hecho, algunas de esas mismas tardes acompañé a mi familia a sus actividades extraescolares, en las que también fui invitada a participar.

Considero que este tipo de experiencias te aportan mucho, tanto comodidad y soltura con el idioma que te corresponda hablar, como el simple hecho de conocer otras costumbres, culturas y estilos de vida.

Solo podría destacar aspectos positivos y estoy convencida de que repetiría si se me volviese a presentar la oportunidad.